Volviendo al Refugio.

Antes de salir de la extraña reunión, mire mi celular y me percate que faltaba poco para el amanecer, por lo que, en vez de ir al principado, con Vlad nos fuimos directo a la Catedral del Santo Suplicio.

-Es mejor refugiarnos en vez de perder la vida por algo tan estúpido como unos cuantos rayos de sol.


Llegamos a la Catedral y rápidamente nos fuimos al nivel subterráneo...


[Necesito la intervencion del narrador para saber si aun esta inundado o no...]

Al final llegamos a la Catedral, a pasar el día a salvo y resguardo. De repente recordé...
"La maldita tormenta!!" Esperaba no hayan daños serios en lo que sería mi nuevo refugio...
- Mina... Esperas grandes daños ahi abajo? O tus hombres habrán contenido la tormenta?

Mire a Vlad y puse cara de preocupación...

- Espero que hayan logrado contener la tormenta, por que si no, tendremos que quedarnos en los cuartos de arriba, pero solo hay uno que no tiene ventanas...-

mire al vacío un momento...

- Bueno, esperemos no haya pasado nada malo.

Sonrei

- Bueno. Creo que lo más seguro sería que nos fuéramos arriba. Yo me las arreglaré en el cuarto con ventanas. Le pondré algunas frazadas gruesas o cosa por el estilo. - Me estiré.- Ha sido una larga jornada, mejor vayámonos a descansar.

- Para mi no es problema compartir cuarto contigo, de echo, no creo que tengas algo que no haya visto antes... Ademas, tampoco te expondría a que te pasara algo con la luz del sol. Así que esta noche, dormiremos en el tercer piso.-

Di la vuelta y comencé a caminar en dirección a las escaleras, para subir al tercer piso, y ahí descansar.
Al llegar a la habitación, abrí la puerta y entre al lugar, me quite el abrigo y lo tendí en el perchero que estaba al lado de la puerta y camine a la cama.

La seguí, deje mi abrigo que seguía empapado en el perchero y me quité los zapatos.
- Bueno, que descanses Mina. - Me metí a la cama para dormir, olía bien. Había sido un día largo y bastante agotador, pero seguía nervioso...

Me senté en la cama, sin molestar a Vlad que necesitaba reunir fuerzas para la próxima noche.
Tome mi celular y llame a Damen para que me trajera una botella de sangre... En menos de 5 minutos este ya estaba tocando la puerta.
Le recibí la botella con la copa y le agradecí por la atención. Este se marcho sin decir nada.

Me volví a sentar a un lado de la cama y me serví una copa de sangre, dejando la botella en el mueble que estaba a un lado de la cama...
Me tome la copa y comencé a pensar en todo lo que había pasado esa noche... En la misteriosa invitación de Wayne al Principado... El super pacto con el culto... Nada de esto me calzaba... Debería ir al Principado y exponerme con los Camarilla... Seriamos presa fácil con Vlad... No sabia que hacer en ese momento...

- Piensa Mina Piensa... que es lo mejor en este momento... Llevar a Vlad a una reunión donde quizás nos tiren la caza de sangre o ir sola, por si pasa algo, el tenga el Liderazgo del Sabbat.. ¿cual es mi mejor opción?

Recosté la cabeza en una de las almohadas y mire al cielo de la habitación...

- Decisiones, decisiones, decisiones...